La pelea de Converse por sus emblemáticas zapatillas

Fuente: La Nación

Tras vender más de 1.000 millones de pares de su famosa zapatilla, Converse se cansó de los imitadores y dijo basta.
El fabricante estadounidense de zapatillas deportivas demandó esta semana a 31 compañías, a las que acusa de copiar el diseño de su modelo más emblemático.
Entre los acusados figuran reconocidas empresas como Ralph Lauren y Wal-Mart, por supuestamente vender imitaciones de las famosas zapatillas "Chuck Taylor".
Y las demandas, que fueron presentadas en Nueva York, también incluyen a compañías con sede en Canadá, Austria, Italia, Japón y China.
Converse, una subsidiaria de Nike, también quiere que la Comisión de Comercio Internacional prohíba la importación y venta de las zapatillas.
Su presidente ejecutivo, Jim Calhoum, dijo que la compañía le da la bienvenida a la competencia, pero "no creemos que otras empresas tengan derecho a copiar el estilo Chuck, que está debidamente registrado".

ZAPATILLA MÁS POPULAR

La popularidad del modelo Chuck Taylor de Converse se ha multiplicado exponencialmente desde que empezó a usarse en las canchas de baloncesto en 1917.
Converse dice que ha vendido más de 1.000 millones de pares de las emblemáticas zapatillas en todo el mundo y gastado cientos de millones de dólares en publicidad.
Converse dice haber vendido más de 1.000 millones de pares del modelo, lanzado en 1917. 
Los fabricantes también afirman haber presentado cerca de 180 recursos legales en contra de vendedores de zapatillas sospechosamente similares durante los últimos seis años para proteger la marca.
Según el profesor de derecho de la Universidad de Pensilvania Polk Wagner, sin embargo, "en lo que a moda se refiere es bastante difícil ganar demandas por asuntos de marcas".
"Ciertamente a los demandantes no se les va a hacer fácil anotar", le dijo a la BBC.
Wagner, sin embargo, también hizo notar que hace dos años el fabricante de zapatos de lujo Louboutin logró registrar sus distintivas suelas rojas.
"En el derecho de marcas el tema es establecer si los consumidores pueden verse confundidos a la hora de identificar el origen del bien", agregó el legista.
"Para ganar, Converse tiene que demostrar que los consumidores ordinarios de sus productos. asocian las características del diseño de las zapatillas con el fabricante de los mismos", explicó.