Por Annalucia Fasson Llosa (Perú) y Pamela Echeverría (Argentina)
Vemos a diario revistas, periódicos,
reportajes y siempre nos preguntamos ¿Cuál es el mensaje que quiere transmitir
la industria de la moda?
A primera vista, pareciera que en las
campañas publicitarias utilizan a las modelos perfectas, con cuerpos esbeltos y
regios, y es que nos han vendido de un tiempo a la fecha que ser delgado es
sinónimo de felicidad, escuchamos frases como que “hay que adelgazar para estar
más guapas” o “hay que estar flaco para sentirse mejor contigo mismo”.
Años atrás se usaba que la modelo sea muy
delgada, de hecho en algún desfile se escuchó a Karl Lagerfeld decir que: “Nadie
quiere ver gordas en la pasarela”.
Sin embargo, esta ridicula tendencia que
parecia exigir que la modelo debia ser tan delgada como una percha de ropa,
está desapareciendo y en consecuencia, cada vez son más las modelos e instituciones
que promueven una imagen saludable y asocian a las modelos con tener cuerpos
saludables.
Como contrapartida, vemos que han surgido las
famosas modelos plus size como la archifamosa Ashley Graham, que está rompiendo
paradigmas y que se ha abierto paso en esta industria, siendo la primer modelo plus size en presentar y desfilar su
propia colección de ropa interior en el pasado NYFW.
Años atrás, pensar en una modelo con un peso
distinto al que la industria consideraba estandar y exibiendo su celulitis en
la pasarela, constituia una imagen de la peor pelicula de terror.
Pero eso hoy cambio y los consumidores y
diseñadores (algunos por lo menos) comulgan con la necesidad de ver mujeres
reales sobre la pasarela.
Los detractores del plus size ven a estas modelos como una amenaza, considerando que
intentan legitimar un estilo de vida y habitos de alimentacion poco saludables.
No hay que perder de vista que las modelos
plus size, generalmente, representan el talle estandar de las mujeres, por
ejemplo en Estados Unidos. Alli, las pasarelas estan plagadas de modelos
extremadamente delgadas, cuando el promedio de las mujeres de dicho pais son
talla 14.
De esta manera, y con el objetivo de combatir
el carácter discriminatorio que contiene en si mismo el termino “plus size”
(siendo que lo que para la pasarela es plus
pareciera representar a la mayoria fuera de ella), es que en Febrero de 2015,
la modelo australiana Estefania Ferrario y la conductora Ajay Rochester
comenzaron la campaña “Drop the plus”
(www.instagram.com/droptheplus) que busca eliminar el termino plus bajo el hastag #droptheplus.
Es que sus impulsoras consideran que el uso del término plus conlleva
a la discriminación y al bullying.
En esa misma linea, la modelo americana Sara
Ziff ha fundado la Organización Model Alliance (www.modelliance.org), que trata de concientizar a las modelos
difundiendo campañas y programas de salud, además de asesorarlas en otros temas
igual de importantes como contratación para modelos menores de edad, cómo
tratar con los agentes, diseñadores, entre otros.
Sin embargo, aún queda mucho por trabajar. Como
ejemplo, podemos citar lo acontecido en febrero de este año, cuando Victoria
Beckham lanzó su colección de ropa, la cual causó una gran controversia, no por
la ropa que lucían las modelos, sino porque éstas estaban extremadamente
delgadas, es decir, que se alejaban de tener cuerpos saludables, por lo que fue
duramente criticada.
Si nos remontamos a la historia, vemos que la
anorexia (trastorno emocional-alimenticio que consiste en que una persona deja
de comer aun cuando ésta se encuentra delgada), ha estado siempre ligada al
mundo de la moda.
De hecho, un triste ejemplo emblematico lo
constituye la modelo Isabelle Caro, fallecida por anorexia en diciembre de 2010, quien
antes de su deceso, realizó una campaña contra la anorexia, tratando de
concientizar al mundo sobre esta problemática.
Sin embargo, y muy a pesar de esto, lejos nos
encontramos de estar siquiera en la puerta de una solución.
Como combinacion fatal de este coctel que
atenta contra la salud y que define de forma negativo el parametro de belleza
en la sociedad, encontramos el retoque digital de las fotos.
La industria se vale de la publicidad a los
fines de ofrecer sus productos, transmitir la imagen de las marcas y generar
ventas. Tal es así que desde hace unos años a esta parte, en las campañas
publicitarias, se usa (y abusa) el controvertido programa de software
denominado Photoshop.
Si
bien la finalidad de este programa es mejorar fotografías y borrar algunos
detalles como arrugas, expresiones en el rostro, perfilar las curvas, etc.,
existe una linea muy delgada de cómo lo debes utilizar y lo que realmente estás
vendiendo, es una ilusión porque prácticamente la modelo con Photoshop es una
persona totalmente diferente a la modelo en la vida real.
Asi, ha habido casos como por ejemplo el de
la modelo Karlie Kloss que por hacerla más delgada hicieron de ella un cuerpo
extremadamente delgado o a la cantante Beyoncé que la mostraron blanca.
Sin embargo, todo parece indicar que nos
encontramos encaminados a buscar una solucion. De esta forma, semanas atrás fue
noticia en todos los medios de la industria que Gucci, Dior y Louis Vuitton han
prohibido que modelos de talla cero (US) caminen en sus pasarelas: el minimo
será de talla dos para mujeres y extra small para hombres. En ese mismo
sentido, las firmas acordaron no contratar menores de 16 años para modelar ropa
de adultos.
Ademas, exigiran para que las y los modelos
puedan subir a su pasarela un certificado de aptitud medica, que indique estan
en condiciones de trabajar.
“Somos responsables en redefinir nuevos
estandares en la industria y esperamos que nuestros colegas se nos unan en esta
nueva etapa”, establecio en una entrevista a BBC Antoine Arnault, director de
LVMH.
Siguiendo esta linea, en Francia se ha
promulgado una ley contra la anorexia, la misma que señala que las modelos
deben mostrar un certificado médico el cual deberá ser expedido por médicos
habilitados, el mismo que tendrá una validez de 2 años y que debe acreditar que
el estado de salud de la persona debe ser evaluado mediante su índice de masa
corporal (IMC).
No hay que perder de vista que el IMC
permitido es de 18 y que inferior a ese índice, y de acuerdo a la Organización
Mundial de Salud, se califica a la persona como desnutrida. Asimismo, esta
norma establece que los empleadores, tales como revistas de moda o agencias,
que no respeten esta ley podrán ser condenados hasta por 6 meses de prisión y
con multas de hasta 75.000 euros.
Un largo camino deberemos recorrer hasta que
imágenes de belleza saludable sean aceptados y, en su totalidad, formen parte
de las revistas de modas y desfiles. Pero el mundo de la moda se ha despertado
y era hora que lo hiciera.
Dove, en su campaña “You are more beautiful
than you think” nos invita a reflexionar sobre el concepto de belleza y como
dentro nuestro, los “supuestos” parametros de belleza que durante años se
instauraron en la sociedad nos condicionan y limitan. No dejemos que nos
definan.