Apasionado y comprometido, Umit Benan es uno de los diseñadores turcos de los más comentados. Después de pasar su infancia en el taller de costura de sus padres, usa la moda para transmitir mensajes y comunicar sus creencias, más allá del estilo.
«Podría hacerlo muy bien escribiendo un libro o una película, pero mi herramienta es la moda ", dice en una conferencia de prensa organizada por 080 Barcelona Fashion, a la que fue invitado.
En su colección, Umit Benan rinde homenaje a la comunidad musulmana en África y más particularmente al hombre negro y musulmán. "Me imagino a todos estos hombres rezando juntos en la mezquita y se reúnen a la hora de comer, al unísono. »
«Más que religioso, mi mensaje es político. Evoco a los africanos y estadounidenses, las dos razas más grandes del mundo hoy en día. Cuando oran, sin importar el color de su piel y sin importar dónde se encuentren, todos se vuelven iguales ante Dios».
« God is Black », el tema de su colección.
« Soy musulmán, por eso me conecté naturalmente con la religión para crear esta colección. Algunos reaccionan bastante sorprendidos cuando digo que Dios es negro. Un día, una mujer me dijo: "Dios es una mujer". Entonces todo depende de todos, sus creencias, su educación, etc. Cada uno tiene su propio Dios y puede haber concepciones muy diferentes. »
En sus colecciones, a Benan le gusta transmitir diferentes mensajes. "Es importante presentar lo que experimentas en la vida. La religión no es importante, lo que importa es la creencia. La conexión entre las personas y Dios. El resto son símbolos. »
Para la próxima temporada, Umit Benan explica que no necesariamente hablará sobre el Islam. Podrá resaltar otra religión, una película o una obra de arte ... "Uso la religión como una herramienta contra el racismo y la desigualdad", agrega.
Sus colecciones están hechas en Italia. "Para mí, el trabajo de la moda en París está mejor ejecutado que en Italia en general. Pero Italia sigue siendo muy importante en cuanto a la producción. El único inconveniente es que todas las marcas de lujo como Gucci o Prada fabrican sus colecciones en las mismas fábricas y éstas les dan prioridad, por lo que, para otras marcas como la mía, la entrega a menudo llega tarde ...»
Cuando el desfile es una fiesta...
« Hace dos años, cancelé mis desfiles en Milán y París. Para mí, el espectáculo es una celebración, una celebración y en estas grandes capitales de la moda perdí esta espontaneidad porque se nos pide mucha seriedad y estar "a la altura". Me gusta desplazarme a otros países, como a Japón, por ejemplo, donde últimamente he tenido la sensación de celebrar algo. ¡La recompensa a mis esfuerzos! »
Benan se considera principalmente un portavoz. Le gustaría que los periódicos políticos hablaran de él y de su trabajo, y no solo las revistas de moda. Así que…aviso a los profesionales.